26/7/18

¡Me llevé un chasco!

 Conversando con una gran empresaria de la localidad, me preguntaba la conveniencia de “entrar a internet” para buscar candidatos con quienes llevar una vida de pareja…Al menos esa es la intención.

Como le tengo confianza a esta gran persona le pregunté: ¿usted ya “entró al internet?. Sí, fue su respuesta.
Y ¿qué tal los resultados? “Ay, oiga, en internet son unas personas; en la realidad son otras. Ni siquiera se parecen facialmente. Algunos escriben muy bonito, pero se expresan muy mal. Espera ver uno a una persona bien vestida, y se enfrenta con otra…”

Me dice, “algunas de nosotras, sinceramente, deseamos compartir la vida con alguna persona que nos parezca interesante, y que sea compatible con los valores que buscamos.”  Pero, pero, (empezó a reirse), ¡me llevé un chasco”…bueno muchos chascos…(seguía su carcajada silenciosa).

Me pregunta ¿qué les pasa a los hombres?. Le contesté, “no sé”, porque no conozco a alguno que “entre al internet a buscar pareja”…No sé si le comenté que conozco a muchas personas que han hecho una gran relación y matrimonio con seres que encuentran en el internet.
No me había comentado, me respondió.

Desde hace unas seis horas, sigo con la pregunta: ¿qué les pasa a los hombres?
Pienso que es momento de responder algo al respecto, con respeto a todos los hombres, genuinamente hombres, y totalmente caballeros,  aquí voy a dar las respuestas.

¿Qué pasa en esas situaciones? En la primera cita cara a cara.

El hombre que busca mujeres en internet tiene las siguientes características:
a)     Egoístas por necesidad y ególatras por convicción. Creen que en internet pueden esconder sus verdaderos valores; es´tan convencidos de que un mundo de mujeres los van a buscar, porque de eso han hecho una forma de divertirse. Y saben que las mujeres buscan diversión.

b)     Sus conversaciones son triviales; el tema central es: Yo.
a.      Yo el que hace; Yo: el que logra; Yo: el que tiene; Yo: el que puede.
b.     Nunca será: Yo: el que sueña; Yo, el que comparte; Yo, el que sirve.

c)     Sus intenciones son de relaciones temporales y con un solo argumento: vamos a divertirnos; de eso se trata la vida. No compromisos, no promesas, no sueños de ambos.

d)     Sus miradas lascivas pueden incomodar. A algunas les puede encantar.


e)     Sus gestos se convierten en comportamientos enfocados a la atracción de la hembra más que a la seducción de la mujer.

Creo que con esos conceptos tienen para corroborar lo que les ha sucedido a todas las personas que “entran al internet” a ver qué encuentran…

Y ¡se llevan un chasco

Hasta pronto. 

Escuela del Razonamiento 19 sept 2023