Como lo he comentado en otras ocasiones hay cosas que se recuerdan, pero vale más no decirlas, porque pertenecen al mundo de la más privada intimidad.
¿Por qué lo afirmo?
Porque los sucesos o eventos pasados son precisamente eso: eventos pasados. El que esos eventos nos hayan dejado aprendizaje, nos hayan dejado heridas o alegrías, esos, precisamente esos, pertenecen al pasado. Y ahi se deben quedar aunque hayan pasado a ser parte de nuestro ser en el presente y para el futuro..
Cabe Aclarar que hay pasados más presentes que el presente mismo. Hay pasados que fueron tan intensos que su fuerza nos acompaña hasta el presente y, posiblemente, hasta el futuro.
Hay sonrisas del pasado que fueron tan dulces que su empalago es para siempre, pero hay cosas que se recuerdan, pero vale más no decirlas!
Hasta pronto.
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