Mi nombre es Optimismo.

¿Qué pasaría en nuestras vidas si, por el día de hoy, nuestro nombre es Optimismo?. 

¿Cree usted que cambiaría algo de nuestro comportamiento?. ¿Cree usted que cambiaría nuestra energía interior?, ¿Cree usted que habría más entusiasmo en cada uno de nosotros?.

Si contestó afirmativamente a todas esas preguntas, entonces su nombre, por el día de hoy, es Optimismo.

Este nombre lleva en sí mismo la fuerza, la energía e inspiración para ver la vida de distinta manera; viviremos de otra forma, pensaremos distinto, experimentaremos otras sensaciones y nuestro rostro iluminará al mundo con una sonrisa limpia y de contagio inmediato.

Y usted, ¿quiere llamarse Optimismo por el día de hoy?

Hasta pronto.

“El amor es para vivir, el Optimismo para contagiar.”