Despido con fuego este año 2011.
Este año 2011 me dejó aprendizajes que he puesto en práctica alegremente, recuerdos que disfruto intensamente, dolores y/o amores que agradezco inmensamente, presencias y/o ausencias que bendigo eternamente, carencias y/o abundancias que comparto generosamente; y muchas otras cosas más que conservo egoístamente en mi interior.
Lo que rescato de este 2011 son: salud, claridad de pensamiento, entusiasmo, alegría, fé, esperanza, gratitud y ganas, muchas ganas, de ser mejor persona. Gracias, de nuevo, año 2011.
Dejo ir todo aquello que solamente pesa y nada deja; destruyo lo que me estorba y no ayuda y me alejo de todo aquello que impide mi desarrollo.
Seguiré el camino de mi transformación personal durante este próximo 2012. Gracias.
Hasta pronto.