"El silencio es un alimento para el alma..."
Grítalo!
Un silencio enriquece, fortalece, corrige, elige, decide y actúa. La acción no necesita palabra alguna. La palabra, a veces, no necesita de acción ninguna.
El silencio para orar, agradecer, enmendar y para aclarar. El silencio es la alegría del alma y el grito del espíritu. El silencio posee una gran fuerza transformadora para emitir una palabra.
Callo hablando y hablo callando.
Hasta pronto…ssshhhh.