3. Mis Frenadores.
Continuando con el ejemplo de la decisión que tomamos, ahora le toca el turno al tema de los Frenadores (externos e internos).
Cuando se ha tomado una decisión, de repente nos encontraremos con terceras personas cuyas opiniones (a veces ni siquiera solicitada de nuestra parte) son contrarias a lo que ya habíamos previamente elegido. En algunas ocasiones, éstas nos hacen hacer vacilar.
Solamente, te comentamos que no hagas caso a comentarios que vayan en contra de tu elección ya tomada. Ellas pueden significar algo en nuestras vidas pero muy poco en nuestras decisiones. Sin embargo, hay algo bueno en esto: reafirmar nuestra meta.
Otro frenador ( el peor de todos) es nuestro miedo. ¿A qué?, no lo sé pero me imagino que es a los resultados de nuestras decisiones. Esto es algo natural, porque hemos vivido con "más comodidad" como estabamos antes. Ahora nos encontramos trabajando en un nuevo plan que exige insistencia, resistencia y mucho trabajo de por medio. Los "frenadores" nos sirven para tomar más velocidad y aprecio por lo que hemos elegido.
Ante toda decisión tomada, esperemos invariablemente lo mejor. De todas maneras, es más benéfico lograr algo de lo que elegimos que a quedarnos como estabamos: solamente, haber soñado.
Hasta pronto.
