Ante los retos, las adversidades y/o situaciones difíciles de la vida que, exigen un esfuerzo mayor, No basta decir solamente "Yo puedo"; eso ayuda, pero no es suficiente. (Bien, ese es mi punto de vista. El suyo es el mejor.)
A mi modo de ver la vida ante las visicitudes y retos experimentados con intensidad y vehemencia he concluido que, con solo esperar con paciencia, o decirme Yo puedo, no es "suficiente energizante" para enfretar con valor y vigor esas situaciones difíciles y aisladas excepciones de la vida. (Le califico como "aisladas excepciones" porque así es el equilibrio y juego de la vida.)
La frase energizante y automotivante "Yo puedo" debe ir sustentada con:
1. Argumentos de vida y con razones susficientes para enfrentarse a ello.
2. Identificación previa de beneficios y ventajas que se lograrán al resolver las situaciones.
3. Diseñar un plan de acciones, palabras, reacciones para enfrentar esos fomentos.
4. Con la convicción de que todo se resuelve, todo se soluciona y todo vuelve a la calma.
Cuando se tienen estos elementos como piedra angular, la frase "Yo puedo" se convierte en el detonador, despertador y recordador que que todo está bien fundamentado, bien argumentado y bien esperado.
"Yo puedo, Tu puedes, Todos podemos" enfrentarnos con valor, valer y alegría ante los excepcionales, inesperados y difíciles momentos de la vida.
Hasta pronto.
Gracias por visitar y recomendar:
www.institutodeperson.net
A mi modo de ver la vida ante las visicitudes y retos experimentados con intensidad y vehemencia he concluido que, con solo esperar con paciencia, o decirme Yo puedo, no es "suficiente energizante" para enfretar con valor y vigor esas situaciones difíciles y aisladas excepciones de la vida. (Le califico como "aisladas excepciones" porque así es el equilibrio y juego de la vida.)
La frase energizante y automotivante "Yo puedo" debe ir sustentada con:
1. Argumentos de vida y con razones susficientes para enfrentarse a ello.
2. Identificación previa de beneficios y ventajas que se lograrán al resolver las situaciones.
3. Diseñar un plan de acciones, palabras, reacciones para enfrentar esos fomentos.
4. Con la convicción de que todo se resuelve, todo se soluciona y todo vuelve a la calma.
Cuando se tienen estos elementos como piedra angular, la frase "Yo puedo" se convierte en el detonador, despertador y recordador que que todo está bien fundamentado, bien argumentado y bien esperado.
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