Los tesoros, dones o alegrías bajan del cielo.
Llegaste a tiempo
sin que te llamara.
Gracias por tu aparición, presencia y sonrisa.
Gracias por tu llegada impactante y silenciosa.
Gracias por tu dulzura, timidez y ternura sin prisa.
Gracias por ser tú la savia de una vida y la de todos los
que están a tu alrededor.
Cuando los seres humanos
buscan el desarrollo en pareja, es más fácil
y práctico porque se unen dos
energías, dos entusiasmos y dos esperanzas.
Cuando usted y su pareja
decidan compartirse todo: conocimientos, habilidades, valores pero sobre todo su alma es cuando se da el
concepto de los vasos comunicantes. El uno y el otro se llenan al mismo tiempo,
ambos son uno y son el otro, cada uno tiene un contenido pero ambos el mismo
significado.
Una pareja es un ser
único y genuinamente indivisible.
Y usted ¿disfruta la
esencia de pareja?
Hasta pronto,
“El amor es para vivir, la pareja para compartirse.”
No hay comentarios.:
Publicar un comentario