Compasionarte es sentir con el alma lo
que vives y aprender de la vida de los demás, aunque sea una vida llena de
carencias (para ti), es posible que sea ignorancia para ellos. Y si lo ignoran,
no son carencias, simplemente son nada.
Compadecerte es sentir dolor, sentir en
carne propia lo que es el dolor ajeno. Dolor por ausencia, dolor por carencia o
dolor por ignorancia.
La ignorancia lacera, la carencia
mortifica y la ausencia desespera.
Hasta pronto.